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La situación laboral en España ha mejorado en los últimos años, y muchas personas como tú piensan en darse de alta como autónomo.
Pues bien, en este post te voy a explicar todas y cada unas de las ventajas e inconvenientes de ser autónomo en España para que tomes la mejor decisión.
Así que, si estás considerando la posibilidad de ser tu propio jefe, estás en el post adecuado. ¡Vamos allá!
Empecemos por lo bueno. Siempre que se escucha hablar de ser autónomo en España se hablan de todos los aspectos negativos, pero nunca de los positivos, o al menos, no tanto. Por eso, quiero animarte un poco y comentarte los beneficios que tiene trabajar por cuenta propia.
Es uno de los aspectos más destacados y que más salen a relucir cuando se habla de la figura del autónomo. La realidad es que tú tomas las decisiones. Tienes el control total sobre tu negocio y puedes establecer tus propias metas.
¿Cuántas veces te has lamentado del horario de trabajo que has tenido en tus experiencias laborales? Estoy seguro de que has estado descontento en más de una ocasión, sobre todo si te ha tocado trabajar los viernes por la tarde, fines de semana o no has tenido jornada intensiva en verano.
Siendo autónomo podrás elegir tu propio horario. Tú decides cuándo empiezas a trabajar, cuándo terminas y cuándo puedes pedirte las vacaciones ¡sin tener que dar explicaciones! No tendrás que ponerte de acuerdo con el resto de compañeros ni realizar el trámite interminable de solicitar las vacaciones.
Cuando trabajas por cuenta ajena, uno de los sentimientos más extendidos es el de quedarse estancado y no seguir creciendo, o al menos, no al nivel que te gustaría.
Cuando eres autónomo tienes la oportunidad de seguir creciendo constantemente, expandirte, ofrecer nuevos servicios y/o productos y tomar decisiones más o menos arriesgadas en la dirección que tú consideres oportunas. ¿No es increíble?
El salario es otro de los aspectos que más frustración genera entre los trabajadores por cuenta ajena. Es muy común tener el sentimiento de que no se valora salarialmente tu implicación en el día a día.
Siendo autónomo tienes la oportunidad de hacer crecer tus ingresos. Y, aunque no siempre mayor esfuerzo está relacionado con aumentar los ingresos, es más probable que cuanto más tiempo y calidad de trabajo le dediques, mayor serán los ingresos.
Esto, además de ayudarte a aumentar tus ingresos, hará que tu motivación crezca a pasos agigantados.
Como autónomo, puedes deducir algunos gastos relacionados con tu negocio, lo cual puede ayudarte a reducir tus obligaciones fiscales.
Por ejemplo, podrás desgravar el IVA de cualquier compra relacionada con tu negocio. Es decir, puedes ahorrar un buen pellizco con esta opción al comprar un ordenador, mobiliario para la oficina, coche, o lo que necesites para trabajar.
Es más, con el auge del teletrabajo, si trabajas desde casa podrás desgravar parte de la factura de luz, agua, internet e incluso del alquiler de la zona de la casa que utilices como oficina.
¿Has oído alguna vez la frase de: trabaja de lo que te gusta y no tendrás que trabajar en toda tu vida? No todos los trabajadores están descontentos con su trabajo. Hay personas que aman lo que hacen y les gusta ir a trabajar y seguir creciendo.
Lo bueno de ser autónomo es que podrás trabajar de lo que siempre has soñado y no dedicar tu tiempo y esfuerzo a labores que no te gustan, e incluso odies.
¿Te gusta escribir, diseñar, vender ropa, pintar…? ¡Siendo autónomo puedes dedicarte a lo que te apasiona!
Como veremos más adelante, una de las principales desventajas de ser autónomo son las mayores cargas fiscales de los autónomos en España respecto al resto de Europa. Es más, incluso si lo comparamos con una empresa también salen perdiendo.
Sin embargo, a partir de los 40.000 euros anuales ya puedes dar el paso y convertir tu negocio en una sociedad. Así que ve pensando en el nombre que le quieres poner 💭.
Darse de alta como autónomo en España cada vez es más accesible, al menos, en el comienzo. En España existe una cosa muy bonita llamada “Cuota Reducida”.
Con esta solo tendrás que pagar 80 euros al mes, durante el primer año, en vez de los 230 euros. ¡Son 150 euros de ahorro al mes! Es un buen empujón para empezar, ¿no?
Además, si la actividad no comienza como esperabas y no superas el SMI, podrás beneficiarte de esta cuota reducida durante el segundo año.
Pero esto no es todo, si tienes la suerte de vivir en Madrid, Andalucía, Murcia, La Rioja y Baleares podrás acogerte a la Cuota Cero. Es decir, tendrás una bonificación del 100% en el pago de las cuotas. Además, el requisito para obtenerla es exactamente el mismo que para la Cuota Reducida.
Es más, en según qué Comunidad Autónoma te encuentres podrás acogerte a más subvenciones para iniciar tu actividad.
Para crear una sociedad necesitas tener un capital para poder iniciar tu actividad. Sin embargo, para ser autónomo no. Solo tienes que cumplimentar el alta y pagar la cuota de autónomo. Es una buena noticia, ¿no?
Ya has visto los beneficios, pero no puedes quedarte solo con lo bueno. Así que, vamos con lo menos favorable de ser autónomo.
Cuando eres autónomo no tienes la seguridad de recibir un salario fijo todos los meses, como lo harías si fueras un trabajador por cuenta ajena.
Tu sueldo dependerá de cuántos ingresos hayas generado en tu trabajo durante el mes. Esto significa que habrá meses en los que ganarás más dinero, pero también habrá otros en los que tus ingresos serán más bajos.
Eso sí, es más probable que ganes más dinero del que ganarías por el mismo trabajo siendo trabajador por cuenta ajena.
Como autónomo, eres responsable de gestionar tus finanzas y asegurarte de generar suficientes ingresos para cubrir tus gastos personales y empresariales. También debes hacer frente a los pagos de impuestos y cotizaciones sociales.
Ser autónomo implica asumir múltiples roles y responsabilidades. Además de realizar tu actividad principal, también debes encargarte de la administración, marketing, ventas, atención al cliente, entre otros aspectos de tu negocio. Esto puede significar una mayor carga de trabajo y exigir una buena organización y gestión del tiempo.
Trabajar como autónomo puede ser solitario, especialmente si no tienes compañeros de trabajo o trabajas desde casa. La falta de interacción y colaboración con otros compañeros en ocasiones puede afectar tu motivación y bienestar emocional.
Sin embargo, esta situación se puede solucionar en el trato con los clientes. Todo dependerá de la relación que tengas con ellos.
Como autónomo, debes encargarte de llevar la contabilidad, presentar declaraciones de impuestos, emitir facturas y cumplir con otras obligaciones administrativas. Esto implica dedicar tiempo y esfuerzo a tareas burocráticas que pueden resultar tediosas.
Por eso, lo mejor es delegar funciones y contar con una buena asesoría que te gestione todos los trámites necesarios para que puedas centrarte en tu trabajo. Un consejo, confía en Openges para ello.
A diferencia de un empleo tradicional, es posible que no cuentes con beneficios laborales como vacaciones pagadas. Tendrás que asumir personalmente estos gastos adicionales.
Los autónomos en España tienen que hacer frente a una carga fiscal mayor a los autónomos de otros países europeos, e incluso que las sociedades en España. Es un lamento que los trabajadores por cuenta propia llevan años de lucha.
Sin embargo, cuando tus ingresos superen los 40.000 euros, que es cuando más se notan estas cargas fiscales, podrás convertirte en sociedad.
Para terminar, voy a contarte el que quizás sea uno de los aspectos que más incertidumbre genera en los autónomos. A diferencia de una Sociedad Limitada, el autónomo responde con su patrimonio personal en caso de deudas en tu negocio.
La respuesta a esta pregunta es algo muy personal, ya que dependerá de a quién le preguntes y sus experiencias previas. Lo que sí es cierto es que, actualmente, en España cada vez se están dando más facilidades para impulsar el comienzo de la actividad empresarial por cuenta propia.
Mi opinión es que, si estás cansado de trabajar para otras personas y quieres dar el salto a montar tu propio negocio, darse de alta como autónomo es la mejor vía para emprender 🚀.